DESPERDICIOS

Cuando vemos en las Escrituras lo referente al sueño de Faraón interpretado por José, sobre los años de abundancia seguidos por los años de escasez, en realidad, debemos comprender que es casi una regla de la vida en un amplio sentido. Casi siempre comenzamos con abundancia de tiempo, de juventud, de salud, de resistencia, financieramente, oportunidades, en fin de tantas cosas que cuando mal administradas al final nos faltan y lamentamos. Acaso ya no hemos pasado por experiencias de haber tenido un mes de tiempo para preparar una tarea que al final la tuvimos que concluir a los apurones y trasnochando desesperados? Eso podría formar parte del anecdotário de nuestras vidas, pero cosas mucho mas serias y valiosas son descuidadas como la capacitación a su tiempo, llegando a una vida adulta sacrificada, con pocos ingresos económicos, o el descuido administrativo de las finanzas llegando a la vejez desprotegidos, sin jubilación o con escualidos recursos. El hombre pareciera insistir en derrochar lo que abunda, así vimos el deterioro ambiental, la destrucción de bosques naturales, la contaminación de recursos hidricos, la extinción de especies animales y todo lo que lo rodea. Estar en Dios es volver a la restauración del principio original, establecido en Génesis, de administrar todo, absolutamente todo.La mala administración no es un buen respaldo para pedir a Dios que siga derramando sus bendiciones; en el libro de Santiago dice: "Pedís y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites" No todo lo que nos deleita tendrá buenos resultados, por lo tanto el don de la administración debe ser anhelado por todos los creyentes y es un respaldo para seguir recibiendo mayor gracia de parte de un Dios que no arroja "perlas a los cerdos" y que honra al que es "fiel en lo poco"
Como conclusión te digo: Si no administramos las riquezas injustas como habremos de esperar que se nos confíe lo verdadero? Es decir, si somos malos administradores con el dinero, el tiempo, el agua, la comida, la salud, sería lógico esperar que Dios nos brinde la administración de la unción del Espíritu Santo y los misterios de la fe? Para pensar... y administrar... Que Dios te bendiga!